Un desecador es un recipiente utilizado en laboratorios para deshumidificar o desecar sustancias químicas.
La palabra «desecador» proviene del latín «desiccare», que significa «secar». Un desecador se utiliza para evitar la contaminación de las sustancias químicas que se almacenan en su interior, ya que pueden reaccionar con la humedad del aire.
También se utiliza para mantener secos los instrumentos y otros materiales que se utilizan en el laboratorio.
Usos
Los desecadores se utilizan principalmente en laboratorios para deshumidificar sustancias químicas y evitar su contaminación. También se utilizan para mantener secos los instrumentos y otros materiales utilizados en el laboratorio.
Algunos usos específicos de los desecadores pueden incluir:
- Evitar la contaminación de sustancias químicas sensibles a la humedad, como ciertos reactivos o productos químicos.
- Prevenir la oxidación o el desgaste de instrumentos o materiales sensibles a la humedad, como herramientas de medición o reactivos en polvo.
- Almacenar sustancias químicas que deben mantenerse secas para evitar su degradación o cambio de propiedades.
- Evitar la formación de cristales en sustancias químicas sensibles a la humedad, como ciertos tipos de sales o ácidos.
- Mantener secos los materiales de limpieza utilizados en el laboratorio, como paños desechables o toallitas húmedas.
En general, los desecadores son una herramienta esencial en cualquier laboratorio donde se trabaje con sustancias químicas o instrumentos sensibles a la humedad.
Tipos
Hay varios tipos de desecadores disponibles, cada uno de los cuales se utiliza en diferentes situaciones y para diferentes propósitos. Algunos de los tipos de desecadores más comunes incluyen:
- Desecadores de aire caliente: Estos desecadores utilizan aire caliente para deshumidificar el aire dentro del recipiente y secar las sustancias químicas almacenadas en su interior.
- Desecadores de silica gel: Estos desecadores utilizan un material absorbente, como el gel de sílice, para absorber la humedad del aire y mantener secas las sustancias químicas.
- Desecadores de vacío: Estos desecadores utilizan el vacío para eliminar la humedad del aire dentro del recipiente y secar las sustancias químicas.
- Desecadores de refrigeración: Estos desecadores utilizan un sistema de refrigeración para enfriar el aire dentro del recipiente y evitar la condensación de la humedad.
- Desecadores de dessicant: Estos desecadores utilizan un desecante, como cloruro de calcio o sulfato de calcio, para absorber la humedad del aire y mantener secas las sustancias químicas.
La elección del tipo de desecador adecuado dependerá de las necesidades específicas del laboratorio y del uso previsto para el desecador.